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Paracentesis

Actuación enfermera frente a la paracentesis

Introducción

La Paracentesis es una técnica invasiva que consiste en realizar una punción en la cavidad abdominal para obtener o drenar líquido peritoneal.

Esta técnica la realizará un médico junto con la colaboración del enfermero, que se encargará de preparar tanto el material como al paciente, ayudará en la realización de la tećnica, llevará el registro de la misma y se encargará de los cuidados del paciente.

Tipos

Según el objetivo perseguido, la paracentesis puede ser de dos tipos:

Diagnóstica

Consistente en la obtención de una muestra de líquido peritoneal para su estudio.

Evacuadora o terapéutica

Consiste en evacuar el líquido acumulado en exceso dentro de la cavidad peritoneal, para descomprimir el abdomen y mejorar los trastornos de circulación provocados por la Ascitis.

Nota: aunque la Ascitis puede tener varias causas, la más frecuente es que se trate de una complicación en el paciente con Cirrosis hepática.

Material

  • Campo estéril.
  • Bata estéril.
  • Guantes estériles y no estériles.
  • Gasas estériles.
  • Antiséptico.
  • Jeringas para extracción de muestras.
  • Catéteres de punción abdominal.
  • Tubos estériles.
  • Frascos de aspiración para Parecentesis evacuadora.
  • Sistema de extracción de vacio para Paracentesis evacuadora.
  • Tubos de analítica.
  • Anestesia local.
  • Agujas IM, IV y S/c.
  • Apósito.

Procedimiento

Empezaremos con la preparación del paciente, para ello, informar al paciente y su familia del procedimiento a realizar es lo primero que haremos. Resolvermos sus dudas y les facilitaremos el consentimiento informado para que lo firmen cuando crean oportuno.

Le pediremos que orine para vaciar la vejiga. Si es una Paracentesis terapeútica, tomaremos sus constantes vitales, mediremos el perímetro abdominal y comprobaremos que tenga una vía.

A continuación colocaremos al paciente de la manera adecuada, que será en decúbito supino o ligeramente inclinado hacia su lado izquierdo, ésto dependerá de la tolerancia que muestre a la postura.

Comenzaremos preparando el campo estéril y depositando dentro de él todo el material necesario para la realización de la prueba. Descubriremos el abdomen del paciente y administraremos el antiséptico impregnado en una gasa de manera circular desde el punto de punción hacia la periferia, esperamos que seque y colocaremos un paño estéril fenestrado.

Durante la punción pediremos al paciente que permanezca quieto y que respire tranquilo, a partir de aquí, colaboraremos con el médico administrándole todo el material que vaya necesitando. Tanto si la Paracentesis es evacuadora o diagnóstica, prepararemos los tubos estériles en el caso que haya que obtener una muestra y recogeremos 10 cc de líquido ascítico para cada tubo. Si la Paracentesis es evacuadora, controlaremos el ritmo del salida del líquido (debe ser lento y contínuo) y conectaremos el sistema de extracción y los frascos para la evacuación del líquido, fijaremos el sistema al abdomen hasta que termine el drenado. Al retirar el catéter pondremos un apósito en el lugar de punción. Recogeremos el material y nos lavaremos las manos.

Cuando la Paracentesis sea terapéutica, tras acabar de realizarla, mediremos el perímetro abdominal del paciente, tomaremos sus constantes vitales, mediremos la cantidad de líquido obtenido y le pediremos que permanenza en cama al menos una hora recostado del lado derecho.

Registraremos todo el proceso en las incidendencias de Enfermería, valorando el estado del paciente. Identificaremos las muestras y las enviaremos al laboratorio de  Microbiología.

Consideraciones

  • Valoraremos el apósito periódicamente, observando la cantidad de manchado y su color.
  • Cambiar el apósito cuando sea necesario.
  • Observar si hubiera hemorragia.
  • Iniciar reposición de líquidos si estuviera prescrito.
  • Iniciar deambulación una hora después del procedimiento.
  • En un paciente cirrótico es necesario aumentar el volumen plasmático para minimizar riesgos de alteración hemodinámica y de la función renal, para ello: Si se han extraido menos de 5 litros de líquido, administraremos expansores plasmáticos como la gelofundina o el hemocé, en una dosis de 150 ml/litro evacuado. Si extrae más de cinco litros, administraremos 8 gramos albúmina por cada litro evacuado, la albúmina viene en frasco de 50 ml (10 gr), por lo que administraremos un vial IV por cada 1.250 ml.